La creación y mantenimiento de una infraestructura de servidores adecuada para garantizar un servicio eficiente, que cumpla satisfactoriamente con las peticiones de tus clientes, puede llegar a suponer un alto coste para tu negocio o empresa.
Si un producto goza de popularidad y por consecuencia de una alta demanda, sus tiempos de respuesta se convierten en un factor fundamental para mantener contentos a los clientes.
Es normal que se busque mejorar dichos tiempos aumentando el número de servidores que se encargarán de proporcionar una respuesta a las peticiones, lo que generalmente lleva a la empresa a comprar más equipos.
Sin embargo, la adquisición de nuevos equipos físicos no está al alcance de todos ya que representa una gran inversión, por lo que para este tipo de problemas la solución es la virtualización de servidores.
¿Qué es la virtualización de servidores?
Un entorno virtualizado te permitirá ejecutar diversos sistemas operativos en un único servidor físico, por lo que una sola máquina te puede ayudar a aumentar los tiempos de respuesta, diversificando sus funciones.
Esto elimina la necesidad de adquirir equipos físicos y reduce en gran medida los costes generados por una restructuración.
Para poner en términos comunes lo qué es la virtualización de servidores, hagamos una pequeña analogía. Imagina que el servidor físico es como un edificio que está dividido en pisos, cada uno de los cuales representa un servidor virtual. Todos los servicios como electricidad, agua y gas, están conectados directamente al edificio principal, pero llegan de manera independiente a cada una de sus divisiones. Cada piso puede contar con un tamaño diferente, tener un consumo de servicios distinto, incluso pueden tener su propia dirección, esto mismo aplica para los servidores virtualizados, los cuales van a existir dentro del servidor físico y consumirán recursos de manera independiente.
En el proceso de virtualización, se “engaña” al hardware de un ordenador (servidor físico), para que ejecute varias copias de uno o varios Sistemas Operativos al mismo tiempo, emulando una BIOS, CPU, memoria, disco, etc.
El sistema operativo virtual cree que se está ejecutando en un ordenador físico, cuando en realidad es una emulación dentro de un programa de software como VMware.
La virtualización de VMware permite a los servidores potentes, con muchos núcleos de CPU y mucha memoria RAM, ejecutar varios servidores virtuales emulados todo al mismo tiempo, y comparte la carga entre ellos para maximizar la cantidad de trabajo que el hardware del servidor real hace, por lo que nunca está simplemente en reposo.
Tipos de virtualización
El término virtualización no es de uso exclusivo de los servidores, engloba todo aquello que puede representarse y emularse mediante el uso de un software, por lo que se puede aplicar tanto a servidores, como escritorios, almacenamiento y redes.
Virtualización de servidores
Como ya hemos dicho, la virtualización de servidores, a grandes rasgos, consiste en ejecutar más de un servidor en un mismo servidor físico. Esto permite sacar el máximo provecho a las instalaciones físicas que tenemos y reduce los costes de mantenimiento.
Virtualización de escritorios
Por su parte la virtualización de escritorios consiste básicamente en tener una representación de un sistema operativo con el cual el usuario puede interactuar y conectarse desde sitios remotos.
De esa manera se tiene todo controlado en un mismo lugar, evitando las complicaciones a las que pueden llevar la presencia de varios escritorios a distancia utilizados por los distintos miembros de tu empresa.
Es recomendado optar por este tipo de virtualización si tienes pensado abrir sucursales en lugares lejanos, o cuentas con una base de empleados que se encuentran en constante movimiento.
Almacenamiento definido por software
El almacenamiento definido por software es otro tipo de virtualización, este busca abstraer el concepto de memorias flash y disco duros de los servidores, combinándolos en depósitos de almacenamiento de alto rendimiento y distribuyéndolos como software.
El almacenamiento definido por software (SDS) hace posible un modelo operativo más eficiente y evita los cuellos de botellas que se pueden generar por la alta demanda de almacenamiento.
Virtualización de redes
Finalmente la virtualización de redes, es aquella que se aplica al combinar varias conexiones de red, entre ellas Internet y alguna otra red de datos que se utilice, en una sola red visible representada por software, la cual después es dividida en más conexiones.
Por ejemplo, si tienes una conexión a Internet de 20 mb, mediante la virtualización puedes asignar 15 mb a tu servidores y sólo 5 mb al resto de los ordenadores de los empleados.
Ventajas de la virtualización de servidores
Estas son algunas ventajas que tiene virtualizar servidores:
- Cuantos más servidores virtuales o servicios aloja el hardware del servidor físico, más memoria y CPU se utilizan y más baratos son sus costes de operación porque solamente será necesario comprar 1 servidor físico, en lugar de adquirir varios servidores.
- Reduce los costes de mantenimiento porque sólo hay una máquina física, lo que también reduce los costes de adquirir o alquilar una sala de servidores. Reduce el consumo de energía y necesita menos refrigeración.
- Es más ecológico, no sólo por un consumo menor de energía, si no porque no existe un equipo físico que desechar.
- Aumenta la eficiencia, ya que los empleados se acostumbran a trabajar con un tipo de entorno que es más eficiente para los componentes de hardware, donde se evita que una aplicación impacte otras aplicaciones al momento de realizar mejoras o cambios, y donde no es necesario tener diferentes conexiones para realizar las mismas tareas.
- Es más flexible, un mismo equipo puede contener múltiples tecnologías.
¿Qué es un VPS?
Como su nombre lo indica, un Servidor Privado Virtual (VPS, por sus siglas en inglés) es un ordenador en formato virtual que es utilizado como servidor dedicado, cuya función consiste en proveer un servicio de alojamiento de Internet o hosting.
Dicho servidor representa una opción económica si deseas tener tu propio equipo para responder a las peticiones que los usuarios hagan a tus sitios de Internet, es más barato que comprar un servidor físico dedicado y más estable y seguro que adquirir un hosting compartido.
Los servidores VPS se han convertido en una de las mejores opciones para el manejo de aplicaciones de manera efectiva, ya que pueden ser utilizados como servidores de correos, de base de datos, de manejo de archivos o como plataforma de desarrollo.
Diferencias entre un hosting compartido y un VPS
La principal diferencia entre un hosting compartido y una VPS es la personalización de la configuración.
Un VPS permite ser configurado con ajustes que se adapten a lo que nuestros sitios demandan. Esto no es posible en un hosting compartido, ya que es un mismo servidor donde se configuran diversos dominios, los cuales comparten la misma configuración, la cual ha sido definida por la propias empresas de hosting.
Además, la estabilidad que da un VPS no puede ser igualada por un hosting compartido.
Si tu servidor recibe muchas peticiones un en hosting compartido, éste puede no responder de la mejor manera e incluso puede dejar de responder en absoluto, ya que frecuentemente en un hosting compartido los ordenadores se sobrecargan, el proveedor no suele garantizar ningún tipo de recurso especial para nuestro dominio, por lo que el servidor puede verse saturado por las peticiones a dominios de otras personas.
En otro artículo de LaWebera explicamos las diferencias entre un hosting compartido y uno dedicado.
Diferencias entre un servidor dedicado y un VPS
Después del hecho de que uno es una máquina física y el otro una virtual, la diferencia más marcada entre un servidor dedicado y un VPS es el precio, el mantener un servidor dedicado puede resultar muy costoso.
Si aún no cuentas con amplios recursos, lo mejor es hacer uso de una VPS. El hosting VPS se puede considerar el paso intermedio entre un hosting compartido y tener tu propio servidor físico dedicado.
Cuándo conviene contratar un VPS
Es recomendado contratar un VPS cuando requieras de un hosting estable que necesite ser configurado de manera personalizada, cuando requieras mayor velocidad de respuesta, cuando necesites estar aislado de otros sitios, cuando necesites correr aplicaciones especificas, instalar algún tipo de software especial, o cuando necesites correr múltiples dominios de tu propiedad.
Si tu sitio empieza a recibir una gran cantidad de visitas y estas en un hosting compartido es tiempo de empezar a plantearte el cambio a una VPS.
Beneficios de tener tu web en un VPS hosting
Entre los principales beneficios que tiene el poseer un VPS se encuentra la seguridad, ya que sólo tú podrás usar el servidor y tendrás acceso a los datos que en él se encuentran.
También está la escalabilidad y la personalización, si necesitas dedicar más recursos a alguno de tus servidores lo puedes hacer sin necesidad de contar con la aprobación de alguien, además de que tienes el control total para hacerlo.
Otro beneficio es la rápida recuperación, ya que es más fácil restablecer el servicio en un VPS que en un servidor físico.
Cómo elegir un buen VPS
Tienes una guía completa para elegir un buen hosting publicada en nuestra web.
Esos consejos debes aplicarlos también a la hora de elegir un VPS, pero en esta sección te vamos a explicar los temas específicos que tienes que mirar para elegir un buen VPS hosting.
Estos son algunos factores generales que hay que tener en cuenta al momento de elegir una VPS.
RAM y CPU
Trata de tener un equipo que cuente como mínimo con 1 GB de RAM, teniendo en mente que tus necesidades exactas variarán según el tráfico de tu sitio web.
En el caso de la CPU, los servidores web generalmente no hacen mucho uso de ésta, salvo que esté alojando algún tipo de videojuego.
Aún así es recomendado identificar cuantos núcleos puedes obtener con tu VPS.
Disco SSD
Un disco SSD es fundamental, necesitas que las respuestas y la transferencias de archivo sean rápidas, para ello es mejor elegir un disco de estado sólido sobre un HDD tradicional.
La capacidad de almacenaje con la que cuente el disco dependerá de la cantidad de información que tus sitios necesitan, pero si no es demasiado un disco de 20GB bastará.
Administrado o no
Siempre debe haber alguien que se encargue de cuidar y controlar el desempeño del VPS, por lo que es importante determinar si estás dispuesto a realizar dicha tarea o no.
En caso de no querer hacerlo se puede optar por un VPS administrado, el cual consiste en contratar un servidor donde el proveedor se puede hace cargo de su cuidado.
Pero si cuentas con los recursos necesarios para hacerlo, puedes elegir un VPS no administrado, situación en la que tú debes asumir la responsabilidad total del servidor y realizar todas las tareas de control por tu cuenta.
Windows o Linux
Define el sistema operativo en que tu servidor funcionará, esta es una decisión que se debe de tomar en base a las especificaciones que tus aplicaciones necesiten.
Si bien para la mayoría de los casos se recomienda manejar servidores con Linux por la seguridad que proporciona este Sistema Operativo, existen casos donde no hay tanta flexibilidad.
Por ejemplo si utilizaras el servidor para alojar un sitio web que se encuentra desarrollado en ASP.NET entonces debes optar por Windows, o si tus aplicaciones necesitan de alguna librería que solamente funciona en un sistema operativo especifico, esa debe ser tu elección.
Escalabilidad
A mayor escalabilidad, mejor rendimiento y mayor seguridad para tus datos. Busca un VPS que te ofrezca los recursos necesarios para no limitar la escalabilidad y rendimiento.
Configuración del servidor
La configuración de su servidor, especialmente si está en un alojamiento VPS convencional, juega un papel importante en el rendimiento de tu sitio web.
Es por esto que antes de elegir un VPS es importante tener conocimiento sobre la calidad de la máquina física en la que se creará el VPS, identificar cuales son los costes si nos excedemos de ciertos limites de transferencia de archivos, cuales son las opciones que se nos proporcionan como sistemas operativos, con qué frecuencia se realizan actualizaciones, saber si se realizan copias de seguridad y cuantas direcciones IP están incluidas con el servicio.
Espero que con todos estos datos puedas elegir un VPS hosting de la mejor manera posible. ¿Se te ocurre algún dato más a tener en cuenta para elegir bien el hosting? Escríbenos en los comentarios.
modificado el 17 junio, 2018 11:37